Act 4: Castella et Legio

Durante muchos años, hemos tomado como referencia el nivel educativo castellano - leonés. Cada año, en las pruebas de acceso a la Universidad, los estudiantes de la comunidad sienten malestar porque en multitud de ocasiones, se ven obligados a emigrar fuera de su tierra porque las universidades castellano- leonesas se llenan con gente de otros lugares.

PISA, según Foces Gil, arroja unos resultados muy esperanzadores sobre la situación educativa en Castilla y León. Es interesante analizar las causas históricas de la ventaja educativa que la Comunidad parece tener, una de ellas es que a comienzos del siglo XX, el estadio de alfabetización superior al 70%. En comparación con el punto de partida de otras comunidades como Andalucía, este dato explica de alguna forma por qué nuestra comunidad es una referencia, el lugar de comienzo para la construcción de una propuesta educativa era más ventajoso, el nivel educativo general de la sociedad era ya algo tangible en el momento en el que se empieza a hacer una propuesta educativa orquestada a nivel nacional y que extendiese la educación obligatoria.

Es por lo tanto una realidad que la tradición educativa de Castilla y León juega un papel fundamental y muy favorable para que los índices educativos sean positivos. Otro factor importante puede ser precisamente el sistema económico que poseemos. Ante la ausencia de una industria muy potente que facilite la inserción laboral de todos los habitantes de la comunidad, los castellanoleoneses pueden sentir presión añadida, una mayor competitividad para encontrar un empleo.

El principal problema de la educación es en esta comunidad el alto índice de fracaso escolar existente. El problema del fracaso escolar no es que el número de titulados sea muy inferior al de matriculados, el verdadero problema es que un porcentaje muy elevado de estudiantes abandona completamente los estudios cerrándose así la posibilidad de que aprendan conocimientos o técnicas para llevar a cabo su profesión. Este fracaso escolar puede deberse a un sistema exigente con los alumnos, que obtiene buenos resultados pero quizá no presta atención a desigualdades sociales o al alto grado de diversificación que comienza a haber en las aulas.

El paralelismo con Finlandia es cuanto menos perjudicial para Castilla y León puesto que hace creer que los objetivos obtenidos responden a políticas educativas similares, cuando el sistema castellano leonés sigue estando basado en una carga lectiva muy importante, el aprendizaje memorístico en muchas ocasiones... Es decir, pese a los resultados de PISA es importante revisar cuál es el rumbo que queremos que tome nuestro sistema educativo y quizá el alto grado de fracaso escolar sea un indicador que deba hacernos replantear si los cambios necesarios corresponden a cambios más estructurales.





Comentarios

  1. No puedo estar más de acuerdo en todo: el buen dato no puede arrastrar ese porcentaje de fracaso escolar , y por otra parte no puede la exigencia dejar fuera a los castellano leoneses de sus universidades.
    Hay muchos cambios estructurales que realizar sin duda, que esperamos que jóvenes como vosotros emprendan con fuerza! Gracias por tus reflexiones!

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  2. Muy de acuerdo, la buena calidad educativa en Castilla y León debe ir siempre acompañada por un buen sistema de apoyo laboral, infraestructura suficiente y un estilo educativo basado en la práctica y motivación de logro que facilite además la transición al mundo laboral, para de esa forma posibilitar el aprovechamiento del potencial creado en beneficio de la propia Comunidad Autónoma.

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  3. Seguidora nueva, me encanta el artículo.

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  4. Gauu!!! No me imaginaba así la información que has publicado sobre Castilla y León

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  5. Nunca me lo había planteado, buen tema ^^

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